Por: Jorge Cano @canofonico

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Al iniciar el día publicamos en Wambra Radio el artículo “Correa, Procusto y el Carnaval”, en el cual señalamos que hoy jugar carnaval se ha convertido en un acto de resistencia al poder.

No nos equivocamos. Este día fueron detenidos 2 jóvenes en la ciudad de Quito, el uno en el parque Alameda (cerca al colegio Nacional Mejía), mientras que el otro en la Av. Napo (cerca del colegio Montufar). Además, fue detenido otro joven en la ciudad de Macas. Esta información la hemos recibido de diferentes medios de comunicación.

Este día el carnaval en Quito tuvo características especiales, miles de jóvenes, estudiantes secundarios, se concentraron en la calle, esta vez no para protestar, sino para divertirse, jugar, ser irreverentes por las fiestas de carnaval. Como queriendo limpiar sus cuerpos jugaron con espuma de carnaval y agua. Como queriendo tomarse el «espacio público» con apretujones, bombas, pero de agua, lanzando harina, huevos, no piedras.

[slideshow_deploy id=’4990′]Pero las calles, ya no están abiertas ni para protestar, ni para jugar carnaval. Es así que decenas de policías, antimotines, caballería, perros y la policía municipal, llegaron a  “precautelar la seguridad y el orden en el espacio público”. Es que claro es muy peligroso para la seguridad del estado que a alguien se le ocurra romper un huevo.

La presencia desmesurada de policías en el parque Alameda, ubicado en el centro de la ciudad y otro grupo ubicado en el sur, intentaron durante todo el día que el carnaval no cumpla su delito: mojarte y hacerte reír de la alegría.

A pesar de todos sus intentos por controlar lo incontrolable, la alegría de estudiantes de uniformes diversos, fiscales, particulares, municipales ocuparon «un parque», ocuparon «una laguna», ocuparon “las calles” y se rieron del poder.