La gira “Mitch Connor” se tomó la capital

La fría noche capitalina del jueves 6 de abril ofreció mucho para todos aquellos que al igual que yo tenían ganas de portarse mal y pasarla bien. Una vez más el Bocabierta se convirtió en el escenario de un show que definitivamente fue mucho más que solo eso, pero para que entiendan mejor lo que intento contarles, les invito a quedarse en este humilde espacio.

Hace algunas semanas André, Fabián y Miguel, de Escape From The Machinery visitaron la cabina de La Movida Independiente para conversar sobre los nuevos proyectos de la banda, quejarnos de la situación política actual y joder un rato.

En medio de la tertulia, André me comentó que la banda mexicana de math rock, For Dummies, los había contactado para organizar algunos conciertos en Ecuador como parte de su gira “Mitch Connor Tour 2k17”, con la que también visitarán Colombia.

El hecho de compartir tablas con artistas internacionales es una experiencia especial para cualquier banda, y For Dummies ya había tenido la oportunidad de tocar con monstruos del post rock mundial como Caspian y This will destroy you.

Con este precedente, los integrantes de EFTM sabían que el show que tenían que preparar debía ser superior a todo lo que habían hecho antes y además resolver los asuntos logísticos como la estadía de “Los Dummies” –que al final se quedaron en la casa de Fabián y Miguel respectivamente– alimentación, movilización, pasajes y todo el royo turro que comprende la realización de una gira.

De alguna forma lo resolvieron todo y les quedó tiempo para armar un cartel sólido y contundente en el que desfilaron nombres como Veda, Finlandia / Singapur y Ficus. Todo estaba muy hablado, el show generó la expectativa esperada y la noche se prestó para que el rock se apodere de la velada.

Por motivos que no pienso explicar en este momento llegamos justo cuando Ficus estaba tocando el último tema de su show. Pese a habernos quedado con las ganas de escucharlos quedamos satisfechos porque sin darnos cuenta, mientas esperábamos a la siguiente banda del cartel nos habíamos colado en la mesa de “Los Dummies”.

Todos los integrantes de la agrupación originaria de Xalapa destilaban buena onda. Su sencillez y humildad son proporcionales a su talento y fuerza en el escenario, pero con quien tuve mayor contacto fue con Giovani, guitarrista de la banda, quien me puso al tanto de la dinámica de la música independiente mexicana y entre cervezas y un poco de sal quiteña llegamos a la conclusión de que ambas escenas resultan ser bastante similares, compartimos la misma lucha pero también tropezamos en los mismo baches.

Días antes del evento, André me contó sobre las extenuantes jornadas de ensayo que EFTM había programado como parte de la preparación para este show, para ellos esta es la parte más importante de todo el proceso, además de la calidad del sonido en vivo. Verlos al pendiente de todo evidenciaba el compromiso que la banda tiene por ser algo más que “panas haciendo música”, su profesionalismo y seriedad son un sello distintivo de su trabajo dentro y fuera del escenario, eran conscientes de que una banda internacional no te pide ayuda para organizar una gira todos los días y tenían que hacer que la oportunidad que habían ganado con tanto esfuerzo valiera la pena.

Escape from the machinery subió al escenario a dar su show e inmediatamente quedaron claras 2 cosas: Una nueva etapa de su carrera había empezado, y las cosas jamás volverían a ser iguales para esta banda que brindó un show lleno de fuerza y seguridad. Si hay algo que deben hacer si están en Quito y buscan algo diferente, sublime y agresivo, tienen que ver, escuchar y sentir el performance de EFTM.

Veda también es de esas bandas que nos tienen acostumbrados a shows increíbles, y este no fue la excepción. Además de ver la impecable interpretación de cada tema del “Colores que nadie ve” también me dejé sorprender por las canciones de su último disco “Hasta donde alcanza la vista”. El público tuvo una buena recepción con la nueva alineación, la presencia de Amalia en los coros y secuencias, resultó ser una agradable sorpresa y un abre boca de lo que la banda liderada por Pablo Molina prepara para este año.

El público ya estaba preparado para el plato fuerte, For Dummies. Su presentación fue un despliegue de energía, desenfreno y honestidad. Sí, lo sentí honesto, sentí la sencillez y calidad humana de sus integrantes implícita en cada tema, ellos no quieren ser la banda nominada a los MTV, ni ser los headliners del festival de música de moda, ellos solo quieren el catalizador de una fuerza envolvente y abrumadora que se sirve de un lenguaje distinto para estimular todos nuestros sentidos con sensaciones nuevas.

Quienes fueron parte de esta experiencia entenderán lo que les trato de explicar en este espacio lleno de memorias fugaces, sin embargo, esto no es para los que fuimos a ver y escuchar el concierto, es para quienes no pudieron ser parte de esta experiencia y están en la búsqueda de nuevas sensaciones y sonidos. Este espacio es una invitación permanente a descubrirnos a través del arte y unirnos para lo único que vale la pena hacerlo en estos momentos, resistir. Resistir desde el arte, desde el trabajo duro y el amor por lo que hacemos.