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Todos los martes varios jóvenes se reúnen para recuperar un terreno, el trabajo es duro, pero va tomando forma, botas, palas, picos y machetes son las herramientas que Patricio, Andrea, Juan, Jhon, Hannah, Tim y otros chicos utilizan para limpiar la maleza y poco a poco dar forma al huerto.

 

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por Juan Carlos González @cajucomvisual

El crecimiento que han experimentado ciudades como Quito y Guayaquil es una preocupación recurrente entre los activistas de huertos urbanos, “si vemos como en los últimos años esta ciudad se ha expandido de manera brusca, hacia los valles, como ha crecido sin planificación” expresa Hannah Valladares, permacultora.

Este es fenómeno a nivel mundial. Estimaciones de la ONU para 2030 cerca del 60% de las personas habitará en zonas urbanas, es así que en los últimos 30 años la migración del campo a la ciudad han acelerado el crecimiento Quito.

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Andrea Solano, de la Casa Uvilla nos comenta “ mientras mayores son los asentamientos humanos surgen varias problemáticas, espacios dedicados al monocultivo, la agroindustria o viviendas en terrenos fértiles, cuando llegué a Quito por primera vez, me asustó el hecho de que las montañas estuvieran llenas de casas, hay menos áreas verdes, dedicadas al cultivo, que sean sustentables ecológicamente”

Según Hannah Valladares “Uno de los actos básicos de la vida se vuelve un acto de rebeldía, sembrar nuestra propia comida nos permite evidenciar que existe una crisis a nivel mundial, y es precisamente esa crisis la que hace que se den respuestas como la permacultura, porque es una apuesta para generar espacios sostenibles y sustentables para la vida, no solamente la vida humana, sino la de la naturaleza”.

Desde la administración municipal de Quito se han dado paso a iniciativas de mapeo sobre proyectos relacionados con los huertos urbanos.

En el portal de ConQuito (Agencia de promoción económica del municipio) en la ciudad existen 2500 huertos urbanos, pero estos no son los únicos, espacios como el de Casa Uvilla no se encuentran registrados por el municipio, y son diversas las iniciativas de jóvenes que van tomando forma.

Andrea Solano, gestora cultural de Casa Uvilla, junto a varios jóvenes del «Colectivo Changa» han impulsado la REDHO, (Red de Huertos Orgánicos) que al momento cuenta con más de 300 miembros en redes (grupo de facebook), en dicho grupo se comparte información relacionada con métodos amigables con el ambiente y producción sustentable, la descripción del grupo menciona que el mismo “nace de la necesidad de juntar fuerzas, que concierten a un mismo camino, el trabajo en comunidad y el compromiso con la tierra”.

Para Anastasia Cole, cofundadora de Brooklyn Grange, “la ciudad siempre dependerá de las granjas rurales para alimentarse; pero tenerlas también dentro de sus límites y aprovechar los terrados en desuso tiene un gran potencial: mejoran la calidad de vida urbana, crean puestos de trabajo, facilitan el acceso a verdura fresca y saludable y procuran educación ambiental y agrícola a todos aquellos que viven en la ciudad y la aman”.

foto: Brooklyn Grange

 

foto: Brooklyn Grange

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La Solución

Para Hannah “la permacultura plantea desacelerar  las formas de consumo, plantea que cada ser humano desde su espacios puede generar sus recursos para vivir bien, sin producir desechos, ya que estos son materia orgánica que puede ser transformada en energía, pues contiene nutrientes, es necesario repensar la relación con el entorno. Lo comunitario es importante, si tienes los suficiente para vivir y tu huerta genera sobre producción, lo puedes compartir, las economías colaborativas pueden generar una mejor relación entre las personas”.

El reciclar, es uno de los factores fundamentales en el procesos que impulsa Casa Uvilla, las cosas tienen, a nuestro parecer, un mayor uso, tu puedes generar tu propio alimento, el HTM (hazlo tu mismo) es una de las propuestas que impulsamos, producir tus alimentos. No necesitas muchos de los productos que se ofertan en el mercado, que es mas saludable una vida con productos de los cuales tu tienes el pleno conocimiento sobre su origen.

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El dato

Todos los martes a las 15hrs hay mingas destinadas a recuperar el huerto de Casa Uvilla*

 

*Casa Uvilla: ubicada en la calle Eustorgio Salgado y Armero, Miraflores – Quito

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