redacción: Juan Carlos González @stokely91
fotografía: Mayra Guzñay @gymayra
audio: José Luis Almeida @cheloals
El auditorio Pedro Jorge Vera tuvo aforo lleno; estudiantes, docentes, y trabajadores de la Facultad de Comunicación Social (FACSO) de la Universidad Central del Ecuador se dieron cita a la Asamblea General, el martes 08 de Diciembre, para debatir la reciente aprobación de las enmiendas a la Constitución en Ecuador, entre las cuales se nombra a la comunicación como servicio público.
Estudiantes y profesores recordaron que a lo largo de la historia la Universidad Central ha expresado sus ideas y expuesto sus voces de demanda, protesta e inconformidad con las políticas adoptadas por los gobiernos de turno, por tal razón opinaron que la convocatoria a asamblea debió darse con anterioridad.
“Una academia que no está conectada con la realidad social, es una academia que no responde a las demandas de su comunidad” dijo Alejandro Camacho, estudiante FACSO – UCE. Este pensamiento expuso la necesidad de repensar el papel de la academia y su situación actual, en un ambiente marcado por posturas apolíticas, más bien encaminadas a los méritos individuales.
A lo largo de la jornada las diversas intervenciones expresaron la necesidad de generar un proceso que permita a la FACSO liderar la discusión en los temas relacionados con la comunicación en el país.
Fernando López Milán, presidente de la asociación de profesores de la FACSO, enfatizó en la necesidad de establecer un discurso de unidad entre los distintos estamentos que componen a la comunidad universitaria, para dar una posición como institución. Además planteó la posibilidad de una demanda de inconstitucionalidad a las reformas aprobadas por la Asamblea Nacional.
Alejandro Camacho, estudiante de la facultad preguntó a los estudiantes sobre su rol en la sociedad, “somos comunicadores, debemos saber sobre el acontecer nacional, no solo nos sumamos en la medida de tomarnos las calles, aquí el problema de fondo no es la comunicación hay más cosas que se ponen en juego”.
La calificación peyorativa hacia las organizaciones sociales por parte del gobierno nacional fue rechazada “el dialogo lo cerró el gobierno, si se nos denomina violentos es porque ellos cerraron el camino al dialogo”.
Cristina Benavides, docente FACSO, planteó que la Asamblea debe ser un espacio para debatir las posiciones que se tiene sobre la comunicación, “tenemos que defender nuestras formas de hacer comunicación y la posibilidad de ser críticos frente a nuestra realidad, levantemos nuestras propuestas pero siempre con criticidad. Lo que aquí necesitamos construir, es pensamiento y voz propia. Estamos frente a una situación compleja frente a temas económicos, políticos y sociales, es momento de tomar una posición, ser actores políticos y decir cuál es nuestra posición”.
Otro de los temas a discusión fue el papel de los medios públicos, que en Ecuador son relativamente nuevos. Los estudiantes criticaron el proceso de institucionalización de los medios públicos y expresaron: “hay la necesidad de medios de comunicación que en verdad respondan a las demandas ciudadanas, pues en los diferentes estamentos de gobierno, tanto local como nacional, utilizan los medios públicos como plataformas de promoción de imagen de la autoridad gubernamental”
Saraí Medina, representante de la Asociación de Estudiantes de la Carrera de Comunicación Social, hizo un llamado a los diversos grupos, frentes y organizaciones estudiantiles, para concentrarse en una movilización.
Así como resultado de la Asamblea, este jueves 10 de Diciembre, día de los Derechos Humanos, la comunidad universitaria de la Facultad de Comunicación realizó una marcha hacía la Asamblea Nacional.
Con carteles como “La comunicación es un derecho” “Que nadie calle tu voz” los estudiantes caminaron hasta la Asamblea donde se dio lectura a las resoluciones de la Asamblea de estudiantes, docentes y trabajadores. Los estudiantes rechazan la enmienda en la que la comunicación se enuncia como un servicio público: “La comunicación es un derecho, no un servicio público, decir eso como decir que el derecho a la vida es un servicio público”