En América Latina, en la actualidad, el modelo económico que se expande a gran velocidad es el extractivismo, un modelo que agrava las lógicas depredadoras. La ola de movimientos sociales que han reconfigurado muchas sociedades latinoamericanas ya han planteado un debate fundamental sobre el desarrollo en el continente. Este desafío consiste en buscar colectivamente alternativas de fondo al modelo que se nos traza casi como un destino.
La oficina de la Fundación Rosa Luxemburg para los países andinos, Radialistas Apasionados y Apasionadas, y el Centro de Derechos Económicos y Sociales les invitan a la presentación del Folleto » Alternativas al Desarrollo: la destrucción del planeta no es un destino” del Grupo Permanente de Trabajo Sobre Alternativas al Desarrollo.
«Alternativas al Desarrollo: la destrucción del planeta no es un destino» es una publicación que propone generar debates entre los diferentes actores que trabajan el Buen Vivir. Plantea como problema inicial que nuestro mundo atraviesa una crisis civilizatoria que, a raíz de las lógicas capitalistas, patriarcales y profundamente coloniales que organizan la sociedad humana de hoy, amenaza la vida de las generaciones futuras, incluso la supervivencia de nuestra especie. El planeta es finito, y el modo de vida depredador de la Naturaleza que se nos presenta como “desarrollo” nos ha llevado a irrespetar estos límites.
Para salir de este dilema, es imprescindible pensar en otras lógicas económicas, otras visiones de bienestar no basadas únicamente en el consumo material, y proponer alternativas concretas.
Esta publicación pretende dar un aporte en este sentido. se presentará el martes 8 de abril de 2014 a partir de las 17h00 en el teatro Demetrio Aguilera Malta de la Casa de la Cultura Benjamín Carrión en Quito.
Se contará con la presencia de ponentes que debatirán el modelo económico, el extractivismo y las alternativas al desarrollo: Patricia Gualinga (Dirigente de las mujeres de Sarayacu); Lilian Álvaro (INEPE), Johanna Rojas (Colectivo de Educación Popular ¡Liberémonos!); y Ana María Larrea (SENPLADES)