Por: Roberto Chávez – @lamalaactitud

Para el movimiento indígena ecuatoriano los diez años de presidencia de Rafael Correa en el poder estuvieron llenos de momentos y motivos para que la defensa de derechos y la movilización social continúe siendo su bandera de lucha ante las políticas antipopulares.

La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador, CONAIE, rompió relaciones con el gobierno nacional en noviembre de 2007 después de una fuerte represión a indígenas, campesinos y colonos en las protestas en la parroquia de Dayuma en la provincia de Orellana que reclamaban que los recursos de la explotación petrolera sean invertidos en beneficio de las comunidades que viven a diario con el extractivismo.

Tras este incidente los años siguientes fueron un constante tira y afloja entre el sector indígena y el gobierno. Las movilizaciones en contra de la Ley de Aguas y la expansión del extractivismo minero en la Amazonia Centro Sur del país cobró la vida de tres indígenas Shuar: Bosco Wisuma, José Tendetza y Freddy Taish.

CONAIE junto a sectores sociales, movimiento sindicales y defensores de Derechos Humanos y de la Naturaleza conformó el Colectivo Unitario que motivó dos grandes movilizaciones nacionales: La Marcha del agua en 2012 y el Levantamiento Indígena en 2015 de las cuales se desprenden más casos de 200 criminalización a la protesta social por delitos como Paralización de Servicios Públicos, Sabotaje y Terrorismo, Ataque o Resistencia, entre otros.

Uno de los puntos de mayor conflicto de estos años fue en 2017 tras militarización del territorio comunitario Shuar de Nankintz, en la provincia de Morona Santiago, el ingreso de la fuerza pública buscaba la apertura de los terrenos para la explotación minera del Proyecto San Carlos Panantza, lo que desembocó en el desalojo de sus tierras a la comunidad Shuar y fuertes enfrentamiento que dejó a un policía caído.

En estos años también se cuenta el inicio de la explotación petrolera en el Yasuní, territorio del Pueblo Waorani y los pueblos en aislamiento voluntario Tagaheri y Taromeanani; la eliminación de la educación intercultural bilingüe; la desaparición de la Pluriversidad Indígena; y la expansión de la frontera petrolera y minera en territorios que hasta ahora no habían sido intervenidos en la Amazonia y Sierra Centro Sur del Ecuador.

Militarización del territorio Shuar – Nankints

Cambios de mando y acercamiento

Durante los años de presidencia de Correa la CONAIE tuvo tres presidentes: Marlon Santí del Pueblo Kichwa Sarayaku y actual coordinador PACHAKUTIK, Humberto Cholango quien fue candidato a Asambleísta Nacional por el partido político del Movimiento indígena y actual Secretario Nacional del Agua; y Jorge Herrera quien antes fue presidente del Movimiento Indígena y Campesino de Cotopaxi MICC.

El 24 de mayo de esto año, Rafael Correa dejó la presidencia de la republica a Lenin Moreno, quien fue su vicepresidente en los primeros años de gobierno. Por su parte el movimiento indígena eligió en septiembre del 2017 como su nueva autoridad al líder Achuar Jaime Vargas

Entre las primeras acciones de Lenin Moreno estuvo el implantar el dialogo nacional con diferentes sectores sociales en búsqueda de un cambio de timón a la forma de gobernar de su antecesor. Motivo de esta apertura el 4 de julio CONAIE presentó a la Asamblea Nacional el pedido de amnistía para luchadores sociales y al presidente de la republica la solicitud de indulto para los líderes sociales e indígenas sentenciados y presos.

Sin diálogos no se puede continuar

Jaime Vargas se posesionó como nuevo presidente de CONAIE, el pasado 12 de octubre en una ceremonia en la que participaron las catorce nacionalidades y veinte pueblos indígenas del país. En su discurso de posesión reiteró que el movimiento indígena no negociará con sus demandas historias y que poner fin a la explotación petrolera y minera será la consigna de su concejo de gobierno.

Posesión de Jaime Vargas como nuevo Presidente del Concejo de Gobierno de CONAIE

El pasado 15 de noviembre la Confederación de Pueblos y Nacionalidades de la Amazonia Ecuatoriana CONFENIAE; filial regional amazónica de la organización indígena nacional, desarrolló su quinto concejo ampliado, el cual dispuso emplazar al gobierno nacional resultados a cinco meses de diálogos sin ningún tipo de avance.

El mandato de las bases amazónicas motivó al desarrollo de la marcha “Por un Diálogo con Resultados”. Esta movilización partió de Unión Base, Pastaza sede de CONFENIAE, el 25 de noviembre y tras 17 días de caminata llegó a Quito sumando marchantes y apoyos a lo largo de su recorrido.

Marcha indígena se prepara para movilizarse desde Unión Base – Pastaza

Las exigencias de la marcha al Gobierno Nacional fueron el libre acceso a las universidades; la restitución de la educación intercultural bilingüe; el cese a las concesiones mineras en territorios indígenas y fuentes de agua; la institucionalización del proceso de diálogo; solución a los problemas emblemáticos de tierras y territorio; restitución de la pluriversidad y creación de institutos para pueblos y nacionalidades; frecuencia de radio para CONAIE, comunidades, pueblos, nacionalidades y organizaciones sociales.

Esta marcha recorrió localidades como Baños de Agua Santa, Ambato, Latacunga y en su llegada a Quito sumó fuerza de organizaciones sindicales, barriales, de trabajadores autónomos, de organizaciones de Derechos Humanos, dirigentes indígenas y sociales, a más de otras delegaciones del pueblo Montubio, pueblo Afroecuatoriano que se unieron a la manifestación.

Marcha Indígena en su recorrido Puyo – Macas

El lunes 11 de diciembre la movilización partió desde el Mercado Mayorista en el sur de Quito llegando hasta la Plaza Grande con aproximadamente 7000 personas. Durante el recorrido se sumaron también simpatizantes del presidente Lenin Moreno que apoyan la Consulta Popular promovida por el Ejecutivo y jóvenes guayaquileños que exigían el libre ingreso a la universidad.

Marcha Indígena recorre calle del sur de Quito

La Whipala que ondea en la plaza

Durante la presidencia de Rafael Correa la Plaza Grande fue un fortín impenetrable para los sectores sociales que no compartían su forma de gobernar o se sentían afectados por sus políticas, por ello cada vez que se realizaba una manifestación, vallas de seguridad cercaban las inmediaciones del Palacio Presidencial.

Luego de años en que los indígenas habían sido impedidos de ingresar a la plaza, una Whipala de no menos de 10 metros que era llevada por hombres y mujeres de los pueblos y nacionalidades hizo su ingreso por la calle García Moreno; tras de ella lanzas de chonta y carteles con consigas sociales en contra de la corrupción y a favor de las demandas sociales, coparon la Plaza Grande del centro histórico quiteño.

La bandera con los colores del arcoíris ondeó en Carondelet nuevamente, tras la movilización fueron recibidos por las autoridades nacionales y el presidente Lenin Moreno, con quien mantuvieron una reunión de dialogo sobre los puntos de exigencia de la CONAIE.

Mujeres Waorani en su ingreso al centro histórico de Quito

Entre los acuerdos logrados están el no entregar más concesiones mineras en el Ecuador; la solución de casos emblemáticos de tierras y territorios como Te Zulay, Tzawata, Shamato y otros; el proceso progresivo de la restitución de la Educación Intercultural Bilingüe a las comunidades y la respuesta inmediata al transporte comunitario; tomar medidas urgentes al problema en el precio de la leche.

Otra demanda urgente que tuvo consenso entre el Ejecutivo y movimiento indígena fue la constitución de una comisión temporal de la Asamblea Nacional que dará solución a los casos de Amnistía para defensores de derechos.

Pese a estos primeros acuerdos y según palabras de sus dirigentes, se mantendrán vigilantes y en constante seguimiento para que los compromisos del Gobierno Nacional se concreten en los tiempos estipulados, mientras se continúa con la búsqueda de salidas a todo el mandato presentado el pasado 4 de julio.

Las voces de la marcha

Zoila Castillo es vicepresidenta del Parlamento de CONFENIAE, ella comenta sobre el recorrido de la marcha desde la visión de las mujeres amazónicas, también menciona sobre la preocupación que le provoca la explotación petrolera y minera en la Amazonía centro sur del Ecuador.

 

 

Marlon Vargas presidente de la Confederación de Pueblos y Nacionalidades Indígenas de la Amazonia ecuatoriana, CONFENIAE, comenta sobre los motivos de esta movilización. El dirigente Achuar resalta el apoyo del movimiento indígena a todos quienes fueron afectados por la contaminación provocada por la empresa petrolera Texaco-Chevron a esto añade su preocupación por la apertura de nuevos campos petroleros y minería a gran escala en territorios que hasta ahora han estado bajo el cuidado y protección de pueblos y nacionalidades indígenas.

 

Leónidas Iza actual presidente de Movimiento Indígena y Campesino de Cotopaxi habla de la importancia de respuestas a los pedidos del movimiento indígena luego de ya seis meses de haber empezado el dialogo con el gobierno nacional.

A esto también acota la importancia de reconocer las lógicas comunitarias sobre las cuales los pueblos y comunidades se organizan, en este sentido indicó que la educación intercultural bilingüe y el transporte comunitario son necesidades urgentes a ser revisadas por el gobierno nacional para mejorar las prácticas comerciales, de trabajo y educación de los pueblos.

 

Yaku Pérez Guartambe Presidente de ECUARUNARI hace un recuento de los hechos de criminalización a la protesta social que ha vivido el movimiento indígena y los sectores sociales durante los años de presidencia de Rafael Correa, sobre ello menciona que defender el agua, la vida y los ecosistemas no deberían ser un crimen y que el movimiento indígena en su conjunto llegará hasta las últimas consecuencias para que sus criminalizados reciban el indulto o la amnistía.

 

Karina Monteros fue una de las 29 mujeres y hombres de Saraguro que fueron criminalizados tras el levantamiento indígena de agosto de 2015, ella también es parte de la Coordinadora del Pueblo Kichwa Saraguro, CORPUKIS y menciona que aún existen 17 personas criminalizadas de su pueblo y tras dos años de procesos judiciales no ha existido respuesta de las autoridades judiciales y políticas.

 

Jaime Vargas presidente de la Confederación de Pueblos y Nacionalidades Indígenas del Ecuador CONAIE, menciona que a lo largo de la movilización se ha sumado otros actores sociales y comunidades de bases que reconocen que la lucha de CONAIE no solo es por los derechos de los pueblos indígenas.

Para Jaime Vargas la movilización y la lucha es una forma valida de defender de la posición del movimiento indígena que después de 10 años pudo volver a la plaza de grande a plantear sus exigencias y demandas.

Mira aquí la memoria de la marcha: