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Alexis Moscoso del Movimiento Guevarista sale en libertad provisional

Por: Mishell Mantuano @MishellMantuan2

Publicado el 05 de septiembre de 2022

Alexis Moscoso, militante del Movimiento Guevarista Tierra y Libertad, quien trabajaba junto a trabajadores autónomos, artesanos y minoristas, fue arrestado al igual que Gabriela Gallardo,  Ernesto Flores, Juan Carlos Bustamante, Omar Campoverde, Jeaneth Yacelga, Silverio Colcha y Carlos Carguachi, el 19 de mayo de 2022. Alexis recibió hábeas corpus con medidas sustitutivas el 31 de agosto de 2022, que le permitieron salir en libertad. Deberá firmar todos los días lunes y se dispuso atención médica periódica para atender el Síndrome de Marfán que padece.

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Alexis Moscoso Espinoza, militante del Movimiento Guevarista Tierra y Libertad, tiene 25 años, estuvo en la carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales en la Universidad Central del Ecuador, donde fue parte del movimientos estudiantiles y luchó por la reforma universitaria. Sin embargo, por cuestiones económicas no pudo concluir con su carrera. 

Antes de su detención, Alexis trabajaba como artesano, hacía diferentes figuras con un material llamado limpiapipas, las cuales vendía en el Centro de Quito. Las ventas que realizaba Alexis eran un sustento para su hogar, a pesar de todo lo que implica ser un vendedor ambulante, “ser perseguido por los metropolitanos, estar en contacto con los peligros que trae la calle”, agrega  a través de una llamada telefónica con Wambra. En consonancia con la militancia que realizaba, era parte de algunos procesos barriales, estudiantiles y otros. 

Junto al Centro de Psicología Popular trabajaba en el barrio Placer Alto con niños, niñas y adolescentes para brindarles refuerzo académico y enseñarles a realizar artesanías, deportes, defensa personal y otras categorías. Asimismo, en San Eloy, cantón Rocafuerte, provincia de Manabí, acompañó alrededor de un año, la organización de los y las vecinas ante un posible desalojo de sus tierras. Alexis narra:  “estuve al frente, por mi posición ideológica y por defensa. Yo vivía ahí y veía cómo la gente entraba en desesperación por salvaguardar su casa porque era el riesgo de que vayan con las tanquetas y los boten de las casas”. 

Alexis Moscoso y siete de sus compañeros del Movimiento Guevarista, el 19 de mayo de 2022, fueron allanados y detenidos en sus domicilios por presunta “delincuencia organizada, trata de personas y reclutamiento para grupos guerrilleros”, según la Fiscalía General del Estado. Desde entonces, él y sus otros compañeros han estado en prisión preventiva, sin sentencia. Los hombres del grupo han permanecido en el Centro de Privación de Libertad del Inca, en Quito; mientras que las mujeres fueron trasladadas al Centro de Rehabilitación Social de Cotopaxi.  

“Una nueva trinchera”

“Uno como revolucionario cuando se mete en esto tiene que entender dos cosas: necesidad y posibilidad. La necesidad de que exista una transformación de la lucha, de la sociedad y la posibilidad de enfrentarse a un Estado que tiene todos los elementos para reprimir, castigar, encarcelar y a pesar de todo ello, decidir plantearse una lucha”, dice Alexis.

Para él, haber estado poco más de tres meses en el Centro de Privación de Libertad el Inca, entre cuatro paredes, significó formar una nueva trinchera y encontrarle sentido a todo el trabajo que han realizado con la gente. “Se tomaron la molestía de encarcelarnos y montar una farsa judicial en contra de ocho personas de un movimiento político que realmente está ayudando a la gente; en lugar de preocuparse por los problemas reales como la falta de educación”. Alexis cuenta que es una nueva experiencia porque fue la oportunidad de ver desde adentro lo que significa la crisis carcelaria. 

A pesar de lo doloroso y complicado que fue para él todo ese proceso, a través de sus dibujos y poesía, pudo expresar sus emociones, sentimientos y peticiones. Lo que sucedió en la detención del 19 de mayo, dice, fue que el “Estado y los medios de comunicación sentaron una imagen de lo que soy yo. Me sacaron una foto y me pusieron en las noticias diciendo que soy un delincuente”. esas acciones para su familia, amigos y conocidos fue algo muy fuerte. 

En vista de ello, Alexis asegura que si la intención de sus detenciones tenía como objetivo debilitarlos como luchadores sociales, “se equivocaron”. Porque según él, cada día nacerá un luchador o luchadora social, “porque mientras haya una madre que cada noche se acueste pensando que le dará de comer a sus hijos al día siguiente, eso la motivará a que luche y enfrente su realidad y dirá ¡Ya basta!”, explicó. 

El proceso de hábeas corpus”

Hace un mes, el colectivo Hijos de Mayo realizó un pedido de hábeas y presentó algunos arraigos debido a la enfermedad de Alexis. Él tiene Síndrome de Marfan, el cual es un trastorno hereditario que afecta con frecuencia el corazón, los ojos, los vasos sanguíneos y el esqueleto. Tras el pedido de hábeas corpus se desarrollaron dos audiencias, la primera se suspendió porque se necesitaba ratificar que él tiene una enfermedad catastrófica y por ende, cuente con un carnet de discapacidad, a pesar de que dentro de sus expediente consta toda la información sobre su padecimiento. Finalmente, la audiencia se reanudó el 30 de agosto y fue dado en libertad, el 31 de agosto de 2022. 

Algo que Alexis recuerda cuando salió de la cárcel es que el resto de sus compañeros a manera de ritual, hicieron una fila y cada uno tomó una zapatilla para darle un pequeño golpe, lo que significa que esperan que no vuelva más. Sin embargo, “si por nuestros ideales debemos volver ahí; lo haremos, porque estamos haciendo algo justo, necesario”. 

Entre las medidas sustitutivas que le asignaron a Alexis está ir a firmar en la Corte Provincial de Pichincha, todos los días lunes y realizarse valoraciones médicas periódicamente. Hasta el momento, de los ocho presos políticos, además de Alexis, Gabriela Gallardo también recibió hábeas corpus con medidas sustitutivas, el pasado 17 de agosto.