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La persecusión a Ola Bini no termina.
Centro de Autonomía Digital es allanado
Por: Gabriela Peralta @gaperalta07
Publicado 08 de abril del 2022
Las oficinas del Centro de Autonomía Digital (CAD) fueron allanadas la tarde de este 8 de abril de 2022, por la Fiscalía General del Estado y la Policía Nacional. El allanamiento se dio a pocos días de cumplirse tres años de la detención del programador sueco, Ola Bini.
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El Centro de Autonomía Digital es una organización, presidida por Ola Bini, informático sueco, detenido en 2019 y acusado de espionaje y hackeo al gobierno de Lenín Moreno. El CAD es una organización que desarrolla Software Libre y forma talento humano capaz de entender cómo funciona la tecnología, comprender los riesgos que tienen las comunicaciones y que desarrolla herramientas para comunicaciones seguras. Esto lo aseguró Rafael Bonifaz, ex trabajador del CAD y actual Coordinador Tecnológico en la ONG chilena, Derechos Digitales, una organización que busca proteger y promover los derechos fundamentales en Internet.
Bonifaz, en entrevista con WambraEc, relató que la persecución a Ola Bini comenzó el 11 de abril de 2019, cuando el entonces presidente Lenin Moreno retiró el asilo político a Julián Assanges. Assange es fundador del sitio web WikiLeaks, plataforma que ha servido para la difusión de información de interés público en diversos países. Ese mismo día, Ola Bini fue detenido cuando se disponía a realizar un viaje a Japón. Viaje que varios meses atrás ya había planificado.
Ola Bini estuvo detenido durante 70 días por un supuesto ataque a sistemas informáticos que pretendía desestabilizar el gobierno de Lenin Moreno y de apoyar a Assange. Esto nunca se comprobó. Sin embargo, Bini fue acusado de haber ingresado a un sistema sin autorización y fue procesado por tres años. Según Bonifaz, “van tres años y el juicio no arranca, porque de alguna forma se inventaron una historia que no la pueden probar y no saben qué hacer”.
Bonifaz, como ex trabajador del Centro de Autonomía Digital y encargado de dar soporte a las computadoras de la organización, aseguró que esas computadoras sirven para programar y para desarrollar Software Libre que está publicado en Internet. Es así que, señaló que, “si querían la información de esas computadoras, era mejor que investiguen qué hace el CAD. Podían ingresar al sistema y descargarse el código-fuente de todos los sistemas que hace el CAD, porque es Software Libre. Todo trabajo que está hecho es público”, indicó.
Por ello, para Bonifaz, el accionar del gobierno ecuatoriano demuestra que no tienen sentido común y razón. “Lo que sí tienen es fuerza, armas, policías, y lo que saben hacer es meter miedo”, asintió. Asimismo, ratificó que lo único que hace el gobierno es atormentar la vida a un programador sueco que trabaja en un mundo en el cual las comunicaciones en Internet son inseguras y donde las personas y sus datos son constantemente vigilados.
A decir de Bonifaz, lo que parece molestar, incomodar y aterrar al gobierno y al Estado ecuatoriano es que la gente se pueda comunicar de forma segura. “La única manera que tienen para combatir eso es meter miedo a esa gente que está desarrollando sistemas que ayudan a comunicarse de manera segura, respetando la privacidad que es un derecho humano”, manifestó.
Al respecto del allanamiento, Carlos Soria, abogado que lleva el caso de Ola Bini, expuso en rueda de prensa que, en horas de la tarde de este viernes 8 de abril, en una nueva investigación no vinculada al Caso Ola Bini, realizada por la Fiscalía General del Estado, se allanaron las oficinas del Centro de Autonomía Digital con una orden judicial sin firma de un juez de garantías penales.
Los policías incautaron computadoras y celulares “sin tener orden judicial”. El abogado Soria ratificó que el hecho se denunciará a fundaciones y a las organizaciones nacionales e internacionales. “Nuevamente un Estado persecutor, pensábamos que esto había acabado”, finalizó.
En 2019, la organización Amnistía Internacional se pronunció respecto del caso y aseguró que se mantiene vigilante del proceso penal. Para Amnistía, Ola Bini es un defensor de derechos humanos, a quien se le han vulnerado sus derechos, por lo cual, exigió que el procesos en su contra se apegue al derecho internacional.
