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Comunidades esperan que se revierta el uso del río Dulcepamba para proyecto hidroeléctrico Hidrotambo

 

Por: Mishell Mantuano @MishellMantuan2

Publicado el 01 de diciembre de 2022

 

 

Desde hace 18 años, habitantes de 140 comunidades indígenas y campesinas han emprendido una lucha en defensa de la cuenca del río Dulcepamba, ubicado en el cantón Chillanes, provincia de Bolívar. La hidroeléctrica Hidrotambo S.A., mediante sus obras de captación de agua obstruyó el cauce del río, lo que provoca inundaciones y priva a las comunidades de su derecho al agua y su soberanía alimentaria; también los limita en sus derechos colectivos y a una vida libre y digna  . 

Las comunidades en resistencia han agotado algunos recursos legales para recuperar el cauce del río Dulcepamba, la vida acuática del río y el acceso legal y físico al agua, no solo para las generaciones actuales, sino también para las futuras.  Por tales motivos, la lucha de las comunidades generó que el Ministerio de Ambiente inicie de oficio, en agosto de 2022, el procedimiento de reversión a la autorización de aprovechamiento productivo de aguas concedida a Hidrotambo en 2016.

  

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Diego Hernández Pacheco, colaborador jurídico del proyecto socioambiental Dulcepamba y procurador común dentro del recurso de reversión de la autorización de agua de la compañía Hidrotambo, dijo que en 2016 se le otorgó a esta compañía la autorización de aprovechamiento de agua y que hubo omisiones por parte del Estado ecuatoriano porque “se olvidaron que en un futuro hay personas que necesitan regar los predios, de la soberanía alimentaria y el ministerio ni siquiera se da cuenta de esas necesidades e incluso otorga agua que no existía en el río Dulcepamba”.

Por tales motivos, en 2018, las comunidades presentaron un recurso de revisión a la Secretaría Nacional del Agua, Senagua, actualmente adscrita al Ministerio del Ambiente, Agua y Transición. Según Hernández, las comunidades obtuvieron una resolución favorable en 2019, donde se le ordenó a Hidrotambo reconstruir su obra. La empresa tenía seis meses para la presentación de los planos y un plazo de dos años para la reconstrucción. Hidrotambo también debió dejar un caudal ecológico, no operar durante el verano y no podía deforestar la zona, entre otras.

Sin embargo, en la práctica, la compañía Hidrotambo ha seguido incumpliendo con las obligaciones establecidas en la Resolución Administrativa N°. 2018-008. Tampoco se ha interesado por precautelar la vida de las personas de las comunidades. “Esa obra es peligrosa y atenta contra la vida de los compañeros y compañeras de la comunidad San Pablo de Amalí”, aseguró Hernández.

En 2015, el río Dulcepamba se desbordó e inundó las comunidades, como consecuencia de la desviación del río que realizó Hidrotambo, lo que provocó que 12 casas fueran arrasadas, cuatro personas fallecieran. Además provocó la pérdida de ganado, de plantaciones, y herramientas de trabajo, entre otras afectaciones. Esta tragedia dejó a la comunidad preocupada y pensando que cada año, el río Dulcepamba se inunde, se lleve casas y cobre la vida de más compañeros y compañeras. De hecho, las inundaciones siguieron ocurriendo en 2017 y 2019, por lo que, la Defensoría del Pueblo  se pronunció e instó al Estado ecuatoriano a tomar acciones inmediatas para precautelar la integridad y la vida de los habitantes de San Pablo de Amalí, para así evitar que los hechos se vuelvan a repetir.  

 

¡Justicia para Dulcepamba! 

Las comunidades defensoras del río Dulcepamba llevan tres años esperando justicia desde que se emitió la resolución con obligaciones que Hidrotambo debía cumplir, en 2019. Según Diego Hernández, la Agencia de Regulación y Control del Agua ha realizado algunas inspecciones donde ha determinado que la compañía ha incumplido con la medida y esto, es una causal de reversión de la autorización para el uso del agua.

Por tales motivos, en agosto de 2022, el Ministerio de Ambiente, Agua y Transición Ecológica, inició de oficio el procedimiento de reversión a la autorización de aprovechamiento productivo de aguas concedida a Hidrotambo. Por tres ocasiones, la audiencia se difirió, hasta finalmente, llevarse a cabo el 01 de diciembre. Hernández cuenta que la audiencia fue para analizar la situación jurídica de la compañía Hidrotambo y decidir si se mantiene o no, la autorización de uso de agua para la hidroeléctrica de  Hidrotambo. 

Durante el proceso, los abogados de la contraparte sostuvieron que “ese no es el procedimiento, se está vulnerando el debido proceso. Eso llama mucho la atención porque no es la primera vez que la compañía se quiere tomar un debido proceso para solapar sus incumplimientos y vulneraciones”, aseguró Hernández. 

La abogada Gabriela Bermeo, defensora de las comunidades, sostuvo que se debe proceder con la reversión y aseguró que la audiencia no ha incumplido el debido proceso, como sostienen los abogados de la empresa. Otro de los argumentos de Bermeo es que  “el costo y beneficio que le significa al Estado ecuatoriano tener una empresa hidroeléctrica que genera pocos megavatios de electricidad, pero sí un daño enorme a 140 comunidades. Además, del peligro inminente que representa para las comunidades y la cuenca hidrográfica del río Dulcepamba”.

El colectivo Justicia Dulcepamba reconoce que el Ministerio de Ambiente, Agua y Transición Ecológica ha dado un paso importante al asumir sus responsabilidades en la protección a la naturaleza y a los derechos de las comunidades de la cuenca del río Dulcepamba y al iniciar el proceso de reversión de la autorización de aguas de Hidrotambo. Por ello, han emprendido toda una campaña en redes sociales con el hashtag #ReversiónYa, exigiendo al Ministerio de Ambiente el cumplimiento de la reversión a la autorización de aprovechamiento de aguas a favor de la empresa.

La resolución de la audiencia será notificada a las partes interesadas, a través de sus correos electrónicos. Todavía no hay una fecha establecida para la entrega de esa resolución; sin embargo, esperan que la sentencia sea beneficiosa para las comunidades defensoras del río Dulcepamba, “que se le quite la autorización de agua a Hidrotambo, porque eso significa que se restituyan los derechos vulnerados al río y que la compañía tenga que retirarse de la comunidad”, dijo Hernández.